Julia Ann se ha sentido sola desde su divorcio, así que está contenta de poder cuidar al amigo de su hijo, que se siente enfermo. Le está preparando sopa, tomándole la temperatura e incluso dejándolo descansar en su cama. Con todo este tierno y amoroso cuidado, el amigo de su hijo se sentirá mejor en poco tiempo. Antes de que Julia le dé el visto bueno, le va a hacer una mamada que nunca olvidará.