Un día con la esclava Made, parte 6 El gusano esclavo sirve como banco para mis botas. Simplemente pongo mis largas piernas sobre su cuerpo. Luego le pongo la suela de una bota en la polla. ¡El esclavo se excita mucho! ¡Su polla se hace cada vez más grande! Yo me vuelvo cada vez más mala y le meto mi fino tacón en el escroto.