Sienna Hudson – la zorra de la recaída

Estoy bastante convencido de que ni siquiera tiene que sentirse atraída por la persona si hay una polla en oferta. Me hizo una garganta profunda, se la metió toda hasta el fondo y le encantó, pude chuparle las tetas y sentir esos enormes idiotas escoceses. De repente, llamaron a la puerta, era la maldita Carli, tuve que hacer que bajara la voz. Conseguí restarle importancia cuando me volví a sentar en el sofá, Sienna pensó que era una chica cualquiera y no su hija, gracias a Dios. Continuó haciéndome una garganta profunda. Le dije que iba a reventarle las pelotas por toda la cara y se agachó y me las chupó como una puta MILF genial. Hambriento de semen no es la palabra, le corrió por toda la cara y en la boca.

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