Hoy te haré sentarte y mirar fijamente mis hipnóticos ojos en espiral, impotente mientras tejo una red de dudas y culpa alrededor de tu débil mente. Te destrozaré, pieza por pieza, asegurándome de que cada parte de ti me pertenezca. Esto no es solo un juego; es tu nueva realidad. La única satisfacción sexual que volverás a obtener vendrá de mis ojos en espiral y mis palabras crueles y burlonas. Repetirás mis mantras, incrustándolos profundamente en tu psique. Eres débil, inferior y ahora, mi juguete. Adoctrinaré tu mente, entrenándote para que no seas más que un zángano babeante y bombeante, completamente bajo mi hechizo. No es solo JOI; es una toma de control total de tu patética existencia. Y tal vez, solo tal vez, si eres una buena marioneta, te permitiré la liberación que tanto anhelas. Pero recuerda, incluso tus orgasmos me pertenecen ahora.