Cariño, estoy muy orgullosa de ti, pero también triste porque te vas del nido. Pensé que, como esta es tu última noche bajo nuestro techo, podríamos celebrar. Quiero decir, irás a la universidad, donde estarás rodeada de coños. Habrá fiestas. Sé que las citas no eran lo tuyo en la universidad. También sé que nunca has estado con una chica. Así que pensé que este podría ser un buen momento para ayudarte a abrirte un poco la cereza y darte algo que esperar cuando estés en casa. ¿Qué te parece si me dejas chuparte la polla? ¡Vaya! ¡Tienes una polla bonita! Mucho mejor que la de tu padrastro. Quiero que me eches tu semen caliente y pegajoso por todas las tetas.