La madrastra preparó té e invitó a su hijastro a la mesa. El pastel que compró no le pareció lo suficientemente sabroso y quiso agregarle algo. El sabor del esperma es lo que faltaba, pensó. Seducir a mi hijastro no fue fácil. Se resistió y quiso irse pero… La madrastra lo detuvo, le quitó los pantalones y se llevó su pene a la boca. Se puso muy cachonda y le dijo que la follara. Se corrió cuando él la folló sobre la mesa. Y al final él se corrió en un trozo de su pastel y ella se lo comió junto con su esperma. Esto resultó ser lo que le faltaba. Subtítulos.
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