La relación entre una esclava y su Ama es un continuo dar y recibir, la esclava se entrega por completo y la Ama le corresponde con benevolencia. Mi esclava es muy obediente y hoy ha sido realmente buena al soportar todo lo que le hice, todavía lleva las marcas en su esbelto cuerpo y por eso se merece un premio. Abro ligeramente la chaqueta de látex y la dejo adivinar mi pecho desnudo hasta que se lo muestro por completo. ella tendrá el privilegio que a los esclavos varones nunca se les ha concedido, podrá adorar mis pechos. Ella está arrodillada en el suelo frente al sofá en el que estoy sentada cuando comienza a acariciar, besar y lamer mis pechos pero luego la hago sentar en el suelo entre mis piernas de espaldas a mí, tiro su cabeza hacia atrás y me inclino hacia adelante haciendo que su rostro desaparezca entre mis pechos.