El coño infiel de mi madrastra

Mi padrastro lleva meses trabajando en un gran proyecto y está dispuesto a hacer un trato con algunos inversores. Vuelo a casa para sorprenderlo y prestarle algo de apoyo, pero he cogido el vuelo nocturno y estoy agotada. Como nadie sabe que voy a ir, me quedo en una habitación barata en el hotel que hay junto al aeropuerto para soñar un poco y no despertarlo en mitad de la noche antes de su gran día. Ahora, con toda la emoción, no puedo soñar, así que bajo al bar del hotel pensando que puedo coger una copa antes de acostarme y volver a mi habitación. Este bar de mala muerte es muy oscuro y lleno de humo. Es un poco sospechoso, así que decido irme, pero en la esquina hay una mujer que no deja de llevar a los hombres al baño. Juro que se parece mucho a mi madrastra. Espera. Oh, maldición. Esa ES mi madrastra. Me quedo en mi rincón y empiezo a filmarla para aprovecharme de ello. A la mañana siguiente, cuando voy a casa de mi padrastro, empiezo a contarle cómo fue mi noche. Seguro que se sorprende de verme. Y se sorprende aún más de encontrarme