Al final de un reportaje sobre espacios verdes, un tema fascinante, ¿no? Nos encontramos con una preciosa Una señora que vive en Sèvres nos invita a tomar un café, simplemente para conocernos. La vista de la cámara lo delata todo y decide hacer un casting, ¡una idea que encanta inmediatamente a nuestra diabla pelirroja y tatuada! ¡Sus ojos y sus posturas sugerentes quedan muy bien en la foto! En resumen, ¡el día fue salvado por esta hermosa zorra en un apetito sexual voraz!